Gabriel Vanrell-Galeria d'Art

Juan José Molina Arbelaez, mas conocido como J. J. Molina, realizó en su obra la difícil tarea de unir la realidad del mundo exterior con la realidad del mundo interior. Lo físico, un devenir constante y bello, rompe con la línea del uno mismo incorpóreo, de cuyo contraste nace su problemática. Sus personajes se  reconocen mejor por sus expresiones, ritos y actitudes que por su misma imagen corpórea, y sus gestos y miradas dominan sobre lo material. En ellos subyace la duda, el silencio y la desconexión entre el deseo y la acción. En conjunto, ponen de manifiesto una escenografía en la que sus roles se diseminan en una danza incompleta, cuasi móvil, tensa, repleta de puntos de concordancia y fuerzas contradictorias que se mezclan fugazmente sin destino. De resultas emerge la neutralidad plástica de una representación mental que invita a traspasar  el marco preexistente envolviendo al espectador en un aurea mística. Perros heridos y presencias fantasmales aportan una imagen efímera y directa del vacío vital.

Tristemente fallecido en 2007, realizó sus más destacadas exposiciones colectivas e individuales en Madrid, Estados Unidos y Colombia, recibiendo varios premios al reconocimiento por su obra y su trayectoria, como la Medalla de Honor, XVIII Premio BMW de Pintura, Madrid en 2003, “El amo”, Primer Premio del Jurado, SalaGesú, Montreal, Canadá en 1995, o “Salón de agosto”, Museo de arte actual, Bogotá, Colombia en 1988.